Humberto Martínez Morosini a 1 año de su partida [Siempre Presente]

Humberto Martínez Morosini

* Nació Arequipa, Perú, 13 de marzo de 1929
† Falleció Lima, 23 de septiembre de 2015

Clásico 1995 , el pequeño homenaje de ambas hinchadas

 

Gracias por Todo , por tomarte unos minuto de tu trabajo para felicitar al club de tus amores , descansa en paz Humberto Martínez y Arriba Alianza Lima.“Alianza Lima ha esperado muchos años para darnos tan grande alegría. Por supuesto que quienes somos simpatizantes del fútbol y aliancistas de alma, corazón y vida, esperar 18 años es nada”

“El campeón es este humilde club que nació en una simple caballeriza allá por 1901, animados por modestos obreros y que hizo residencia en este grupo de gente querendona y alegre de La Victoria; en este club, en el que hace 70 años albergó a la máxima expresión del fútbol peruano, Alejandro Villanueva”

Periodista Mario Fernandez » Nadie ha narrado noticias o relatado partidos de fútbol como él. Rompió los moldes de las transmisiones radiales y, cuando pasó a la televisión, no solo condujo noticieros, programas concursos o presentó a las figuras más rutilantes del espectáculo, sino que también nos contó cómo el hombre llegó a la Luna y nos hizo explotar de euforia cuando el “Nene” Cubillas o el “Cholo” Sotil enviaban el balón “al rincón de las ánimas”
Aquí una entrevista por la Revista Club Regatas

Humberto Martíinez Morosini

 Entrevista a una leyenda del periodismo y asociado del Club

Persona sencilla, asociado desde 1975, maniático del geniograma, hincha de Alianza Lima y admirador de “Manguera” Villanueva, amante del buen arte, del cine y uno de los mejores periodistas deportivos de nuestra historia. Humberto Martínez Morosini ha dejado grandes enseñanzas durante sus 60 años de carrera periodística y sus 83 de vida, los cuales, con su ayuda resumiremos en cinco partes. “Mi época más hermosa” Humberto Augusto Martínez Morosini nació un 13 de marzo de 1929 en el departamento de Arequipa. Creció en una sociedad muy conservadora, en donde el líder de la familia era el padre y se convivía en un ambiente de respeto y cordialidad; existían horas señaladas para tomar desayuno, almorzar y cenar, asegurando siempre las reuniones familiares. “Mi época en el colegio San Francisco de Asís fue la más hermosa de mi infancia y la más beneficiosa en mi vida”, manifiesta Don Humberto, quien podría enumerar cada uno de los nombres de sus profesores, a quienes considera hasta hoy como muy importantes en su formación intelectual. Durante esta etapa, Humberto era un radioescucha un tanto maniático, y en el deporte con mayor razón. Escuchar partidos de fútbol nacional e internacional fue el inicio de su gusto por las transmisiones deportivas. De aviador a médico “Cada vez que pasaba un avión por la casa, mi hermano iba presuroso al techo solo para verlo pasar”. La pasión por la aviación que tenía su hermano contagió a un joven Humberto, quien, a pesar de no tener el apoyo de su familia, decidió viajar a Lima para presentarse en la Escuela Club de Aviación.

Arribó a la capital y de frente acudió al local de la Fuerza Aérea, en Las Palmas, donde tres mil candidatos iban a pasar los exámenes médicos, físicos y psicológicos. De acuerdo con lo apreciado en una de sus radiografías a sus pulmones, le diagnosticaron tuberculosis; él, contrariado por el resultado, decidió armar un laberinto por tremenda falla, dando así por acabadas sus posibilidades de llegar a ser aviador.
Pero bien dicen que cuando se cierra una puerta, se abre otra. “Se me presentó la oportunidad de seguir la carrera de Medicina, que yo consideraba una profesión muy linda. El hecho de sentir la vocación de salvar vidas me emocionaba”. En ese momento Humberto viaja a La Paz, decidido a estudiar en la Universidad de San Andrés, la más prestigiosa de la época. La carrera duraba 7 años, dos años menos que en Perú, pero tenían el plus de contar con excelentes profesores, muchos de ellos catedráticos que venían de Europa.

Para transmitir los partidos, don Humberto hacía unos planitos en donde la cancha se dividía en 32 cuadros pequeños y aprendía bien los nombres de todos los jugadores.

El engreído de la radio
Fue en la Universidad de San Andrés donde conoció a muchas personas que trabajaban en la radio y, por coincidencia, eran de Arequipa. “Si bien yo sentí una vocación por la radio desde muy niño, porque no había televisión, fue en Bolivia que empecé a conocer el verdadero significado de la radio”, comentó.
En Arequipa trabajó en casi todas las estaciones radiales, entre ellas: radio Arequipa, Continental o Landa.

Cada transmisión aumentaba su vocabulario, su afición por el deporte e iba formando una mayor capacidad analítica como periodista deportivo. Fruto de este inicio fue que llegó, siendo aún muy joven, a las radios limeñas, donde trabajó con gente mayor. Era “el engreído”, el niño de la radio.
El salto a la ventana
Humberto trabajó en radio Panamericana durante diez años, y escuchar cada una de sus transmisiones era una experiencia única. Una de sus técnicas para brindar esas narraciones fuera de lo común era escuchar emisoras internacionales. Además, admiraba a un hombre excepcional, Juan Sedó, quien tenía una radio netamente deportiva.

Para transmitir los partidos, don Humberto hacía unos planitos en donde la cancha se dividía en 32 cuadros pequeños y aprendía bien los nombres de todos los jugadores. En un lado jugaba un equipo y en el otro lado jugaba el otro. El objetivo: quitarle la simpleza y la limitación del vocabulario que tenían las narraciones. “En ese entonces todo era ‘toma la pelota fulano, la lleva, sigue con la pelota’. Entonces yo, a través de mi plano, situaba al resto de jugadores y así creaba más realismo: ‘fulano avanza por la derecha con la de cuero, la número 5, la blanquinegra, etc.’. Empecé a añadir nombres, pero no a lo loco ni palabras fuera del idioma castellano; fui tomando los sinónimos y los fui añadiendo”.
Durante su época radial, tuvo una formación no muy grandilocuente, pero aprendió lo fundamental: cómo había que pararse o cómo se manejaban las manos. Todas esas cosas elementales le sirvieron para dar el salto a la pantalla chica, un mundo totalmente nuevo. Don Humberto resume así sus 50 años en Panamericana Televisión: “empezamos siendo un grupo realmente de amigos, porque habíamos hecho radio. Luego fuimos siendo una casa de mucho respeto, donde nos mantuvimos durante muchos años en el primer lugar. El esfuerzo de traer figuras destacadas fue una de las razones para que ocupáramos un lugar de privilegio”.

Familia
Padre de 4 hijos: Roberto, Humberto, Milagros y Marisol, a quienes educó y formó de manera correcta. Su mayor deseo es celebrar el 5 de abril del próximo año 60 años de casado con su esp osa Emma Meza.

“La mujer inteligente, más que convertirse en una simple compañera, tiene que ser alguien que nos ayude y que nos oriente, porque somos seres humanos y cometemos muchos errores que ellas nos ayudan a solucionar”. Una idea que resume el amor y la amistad entre ambos. Es su secreto.

3 X 3: Tres preguntas
rápidas a Humberto

¿Quién es el mejor jugador
de la historia?
Messi. Es un fenómeno.

¿Quiénes fueron tus
mejores entrevistados?
Luis Alberto Sánchez
y Javier Pérez de Cuellar.

Una frase para tu vida…
“Todo está escrito, todos tienen
señalado un destino”.